¿Iremos a unas terceras elecciones? Es curioso ver cómo desde muchos medios de comunicación, grupos de ‘intelectuales’, entre los que se encuentra un famoso ‘jarrón chino’ del PSOE al que más le valdría tener la boca cerrada, están presionando a este partido para que se abstenga en aras de un no sé qué alto sentido de estado, para que así, sin más y por la cara, pueda seguir gobernando el presunto ‘sobresueldos’ y presunto Alí-babá, jefe de una presunta banda de asaltadores, como presuntamente es el PP.
No hay día que no nos levantemos con un nuevo caso se corrupción. Ya a la Sra. Rita Barberá pide el fiscal del Tribunal Supremo que se le investigue por el Caso Valencia; tres altos cargos nacionales de este partido procesados por destrucción de pruebas y obstrucción a la justicia… Y esto unido a todo lo que ya está en marcha y sabemos, además de haber desmantelado España entera, en lo que era el estado del bienestar. ¿Y por sentido de Estado hay que dejar gobernar a toda esta gente?
Todos estos ‘acólitos’ del PP, incluida la COE, directores de medios afines e ‘intelectuales’, parecen tener patente de interpretar como dogma de fe, el sentir de todos los españoles cuando dicen que hemos votado ‘diálogo’. ¿Quiénes son ellos para interpretar el sentido de mi voto? Yo he votado al PSOE, pero no para que mi voto vaya al presunto ‘sobresueldos’. Y lo mismo que yo, el resto de ciudadanos, ya que de seguir así, el próximo gobierno, como ya ha apuntado alguien, tendrían que formarlo desde Soto del Real.
Es una tropelía que salgan los dirigentes del PP, y en vez de caérseles la cara de vergüenza, tengan la desfachatez de amenazar a toda España diciendo que si no gobiernan ellos, no habrá subida de pensiones, ni salario de los funcionarios, etcétera.
El Sr. Rajoy, lo que realmente tiene que hacer si tuviera sentido de estado, que no lo tiene, es sentarse a negociar, llamar a todos los líderes políticos y poner encima de la mesa las propuestas y reformas que España y los españoles necesitan. Pero no, lo que de verdad quieren es obediencia y sumisión para seguir desmantelando, si es que aún se puede más, lo poco que queda de derechos y libertades que había costado muchos años conseguir. Y es lo que los poderes fácticos quieren, a la vez que hundir y hacer desaparecer la única alternativa posible a todos estos desmanes como es el PSOE.
Es el turno del PP: trabajen, mójense y con sus afines consigan lo que ya han conseguido para la mesa del Congreso, que los números aquí sí dan. Y si fracasan, ya verán desde otros ámbitos cómo se puede llegar a otras posibles soluciones.
Soluciones, que en honor a la verdad, están más que difíciles, ya que los números no cuadran hoy. En diciembre sí, y los que entonces pusieron todos los palos en las ruedas del PSOE para que éste se hundiera y no pudiera formar gobierno, ahora claman por lo que entonces rechazaron. Ciudadanos al negarse a pactar con Podemos, y éste a la inversa.Hoy, cuando todos vamos a la baja, aunque unos más que otros, vemos con preocupación lo que pudo ser y no fue.
Cuando además la gente ve a los que venían a regenerar la vida de los españoles, dos de los cerebros y padres fundadores de Podemos. Uno, Monedero, ya por segunda vez sancionado por incumplimiento de las leyes tributarias. La primera vez devuelve de forma inmediata 80.000 € a la Hacienda Pública como el que se saca un puñado de calderilla del bolsillo y ahora deberá devolver otros 40.000. Pasará lo mismo. Vamos, que 120.000 € los tenemos cualquiera debajo del hule de la mesa, como tenía mi abuela estampas de la Virgen de Carmen, para echar mano a ellos en cualquier momento.
Y otro de los cerebros, el Sr. Echenique, que metiéndose siempre con tirios y troyanos, tiene a un trabajador más de un año sin contrato y sin alta en la Seguridad Social. Según el ‘jefe supremo’ de Podemos, de cuyo nombre no quiero acordarme, son ejemplo de ética y honradez. Sí señor, así se regenera España con estos ejemplos de honradez.
Por tanto, o hay un acuerdo de gobierno con Pedro Sánchez a la cabeza, apoyado por Unidos Podemos y Ciudadanos, o habrá terceras elecciones. No hay otra. Pero señores, no culpen al PSOE ni echen sobre sus hombros la responsabilidad de falta de acuerdo, ni le pidan responsabilidad de estado, cuando los demás están durmiendo la siesta.
Y unas terceras elecciones, pueden, muy probablemente, dar la mayoría al PP ya sin necesidad de pactos con esa base sólida que digo en mi anterior artículo de todos los grupos neo-fascistas que hay en el PP, más los votos prestados a Ciudadanos, que al ver la inoperancia de sus dirigentes volverán al redil de donde salieron. Entonces, como dice el Evangelio, “será el llorar y el rechinar de dientes”, y a callar. Y diremos como la sultana Aixa, madre del último rey islámico de Granada, Boabdil El Chico, cuando entregó la ciudad a los Reyes Católicos: “Llora como una mujerzuela lo que no supiste defender como hombre”.