domingo. 12.05.2024

'Apura-orcillas', 'Rebaña-peroles' y 'Arrampla-gachas'

¿Cómo habéis recibido la primavera?, ¿bien? y la Semana Santa ¿qué tal? Algunos la viven intensamente desde la reflexión espiritual y otros  simplemente salen de fiesta, otros se  acercan a ver las procesiones o se dedican simplemente a descansar.

Luego están otro tipo de paisanos distintos, de los que vamos a hablar hoy, todos los conocemos o tenemos alguno entre nosotros. Son peculiares e inconfundibles, vienen en manada como los ñus en los documentales de la dos… ellos se hacen querer con sus ‘cosillas’. Son entrañables, son incorregibles, ellos son… ¡Tatacháaaaaaaaan! Los ‘Apura-orcillas’, ‘Rebaña-peroles’ y  ‘Arrampla-gachas’.

Este tipo de paisano vive fuera del pueblo y casi siempre viene en las fiestas más señaladas. Habla maravillas de la ciudad donde reside pero al día siguiente de jubilarse ¡YA LOS TIENES AQUÍ! Les gusta debatir sobre las ventajas de la urbe, pero puente que pilla, puente que ¡YA LOS TIENES AQUÍ! Te insisten en que ellos ya no ‘sabrían’ vivir en el pueblo, pero fiesta que enganchan ¡YA LOS TIENES AQUÍ!

Se destacan por ‘apretarse entre pecho y espalda’ durante su corta estancia (en este caso  ‘Semanasantil’) grandes cantidades de todos los productos que tenemos en el pueblo y son representativos de la temporada.

En estas fechas hablamos de los potajes de vigilia, bacalao con tomate y arroces con duz. Como no suelen tener casa propia, y si la tienen no hay apaño, suelen hacer el estropicio en la casa de los padres o en su defecto de algún hermano, hermana o pariente.

Se les puede encontrar en los bares a la hora del aperitivo y se distinguen del resto de socuellaminos porque suelen traen coche de alta gama y tienen que aparcar en la puerta del bar, o dar dos o tres vueltas pa’ que los vean bien.  El ‘rebaña-peroles’ sólo pasará al bar cuando tenga constancia de que los del pueblo nos hemos dao cuenta y nos ha dao tiempo a decir: “¿eseeee que ha pasao no es fulanitooo?, ¡Sí hombre, el que se fue a Alicante!, ¡menudo carro lleva el pájaro!…”.

Es entonces cuando el paisano pasa al establecimiento saludando muy efusivamente, y a la hora de marchar a casa alguien, ellos suelen decir: “¡No hoooombre nooo, tomate otra copilla que invito yo!... Nos ha jodío, el apura-orzas va a llegar a mesa puesta, no tiene prisa ninguniiiica.

Tras beber Yugo a vuelcabombona, probar el vino del pueblo que en ese momento esté de moda, (este año, por ejemplo, el de los Cautelas) y zamparse dos o tres raciones, llegan a casa del familiar con una alegría desbordante a abrocharse lo que caiga en el plato y rematar con un ‘palé’ de torrijas y un cántaro de arroz con duz. Todo esto acompañado de frases que sólo un buen apura-orzas sabe decir con su tono y cadencia: “¡Qué bien vivís en el pueblo leche!, ¡vaya equipete güeno tenéis este año ehhh!, ¡menudos precios tienen los cubatas, allí en Madrid lo mismo te cuesta el triple!”. Son algunas de las frases más pronunciadas por los ‘arrampla-gachas’.

Un apura-orzas no suele estar mucho en el pueblo, lo normal son dos, o a lo sumo, tres días. Lo justo para arramplar, llenar el maletero de vino, lomo de orza, mantecaos en Navidad, berenjenas en feria etc.

La mayoría, el día antes de marchar suele decir: “¡Nos vamos ya que hemos quedado unos días en Baqueira con unos compañeros del trabajo!”, o “¡No nos quedamos más porque nos quedan tres días y queremos pasar por Santi Petri!”... No os dejéis engañar, el ‘apura-orcillas’, no va a ningún lao, se va a su casa, a su destino, regresa a Madrid, Alicante, Valencia, Barcelona, y se va acordándose de su pueblo, de la buena gente que allí queda, de lo bueno que le sale el potaje a su madre, las torrijas a su tía, el arroz con duz a su cuñada, de lo fría que te ponen la cerveza en el bar de siempre, del uno-cero en el minuto noventa y tres, de los ‘cuatrocincuen’ que te piden por un cubata bien puesto en cualquier pub del pueblo y en copa de balón, de que cada vez suenan mejor las cornetas y tambores y de lo guapa que iba la Soledad el Sábado Santo.

Socuellaminos, cuidemos a esta especie, no dejemos que se extinga. Ellos son también parte de la esencia del pueblo, presumen de Socuéllamos allá donde van, de su vino, de su tierra, de sus fiestas. Tened siempre la orcilla llena, el perol rebosando y las gachas follando que ya se ocuparan ellos de apurar, rebañar y arramplar haciendo honor a su denominación.

Feliz primavera a todos.

'Apura-orcillas', 'Rebaña-peroles' y 'Arrampla-gachas'