El pasado 30 de diciembre, la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, firmaba un convenio de colaboración en materia de pobreza energética con el presidente de Cruz Roja en Castilla-La Mancha, Jesús Esteban Ortega, mediante el cual encargaba a la ONG el pago de las ayudas a la pobreza energética de 150 euros, destinadas a 10.000 familias de la región.
Aurelia Sánchez destacaba la distribución de las ayudas por provincias, con 3.004 familias en situación de pobreza severa en Ciudad Real, 2.864 en Toledo, 1.872 en Albacete, 1.203 en Guadalajara y 1.056 en Cuenca, lo que completaba una población diana de 10.000 familias.
El procedimiento para la asignación de estas ayudas se iniciaría por parte de los Servicios Sociales municipales, que ya cuentan con los antecedentes de las familias con historia social de pobreza severa, entre las que se priorizaría a las que tengan hijos menores de 16 años a su cargo, si bien atenderán también a las familias en situación de pobreza sobrevenida con ingresos inferiores a 332 euros al mes. Tras el diagnóstico, los Servicios Sociales tendrían que emitir un informe dirigido a los directores provinciales de Bienestar Social en el que recomendarían la ayuda y serían las direcciones provinciales las que tendrían que comunicar a Cruz Roja los datos de la familia beneficiaria para que la entidad efectúe el pago.
En lo que respecta a Socuéllamos, la Concejalía de Servicios Sociales ya ha iniciado los trámites para poner en marcha estas ayudas, cuyo período de vigencia se extiende entre el 1 de enero y el 31 de marzo. "En estas primeras semanas estamos informando a las familias sobre la ayuda y valorando la idoneidad de cumplimiento de los requisitos. La Concejalía ha comenzado a tramitar esta ayuda ya desde la segunda semana de enero", ha dicho la concejal de Bienestar Social, Vanessa Sáez.
Los requisitos para ser beneficiario de la ayuda son tener un historial social en Servicios Sociales previo al 1 de noviembre de 2015, tener hijos a cargo menores de 16 años y unos ingresos, según miembros de la unidad familiar, que sean menores a las siguientes cifras:
Un adulto y un menor: 5.174.91 anuales;
Dos adultos y un menor: 7.165,26 anuales:
Por cada menor se incrementarían los ingresos en 1.194,21 anuales;
Por cada adulto se incrementarían los ingresos en 1990,35 anuales.
Al mismo tiempo que se gestionan y conceden las ayudas, las entidades colaboradoras y los técnicos de Bienestar Social, realizarán una función de asesoramiento a las familias beneficiarias del plan de ahorro energético, sobre cuáles son las medidas que pueden introducir en sus hogares para hacerlos más eficientes desde el punto de vista energético.
