Y el espíritu de la música negra se hizo carne. Turno hoy para el funky jazz en la segunda sesión del ‘Finde de Jazz’ que devuelve este género universal a nuestros bares. Lo cierto es que la magia del viernes era difícil de recrear. Es lo que tienen las atmósferas, que nunca se sabe cuándo van a aparecer.
Aun así, una gran parte del público del primer día repite el sábado, seguramente con el anhelo de prolongar un viernes que ya fue y ahí quedó, para la memoria. Hoy sale a escena Natural Funk y el pub Edén recibe con agrado un ambiente que va tomando forma –y tercios- a la espera de que llegue el sonido.
El grupo es impecable. Acapara todo el protagonismo la vocalista, Sheila Blanco, que es toda rizos y toda voz. Comienzan con temas conocidos. Suena en el primer pase clásicos como Reach Out –ese I´ll be there- o el mítico Forever and ever de Aretha Franklin. Tienen calidad y fuerza, aunque el público está algo frío.
Es un gran concierto, la gente lo pasa bien, pero los que estuvieron el viernes añoran el saxo, el contrabajo, el swing. En cualquier caso, es música de calidad, rítmica, conocida, bien ejecutada. Es sábado. El germen está ahí. En las conversaciones de barra el comentario es común: “a ver si esto va a más y poco a poco se van haciendo más conciertos”. Esta primera prueba no ha dejado lugar a dudas: Socuéllamos quiere música en directo. Queremos jazz.
