Socuéllamos vivió este viernes una gran fiesta de los años 60 y 70 a pesar de la importante bajada de temperaturas. Se trata de una de las fiestas más representativas del Carnaval de Socuéllamos y pocos pueden resistir la tentación de rememorar los auténticos guateques. Siempre tuvo seguimiento, pero desde que se cambió al viernes, es una fiesta masiva en la que participan personas de todas las edades.
Desde el inicio de la noche, los bares de copas de la localidad se llenaron de pelucas, enormes gafas de sol y pantalones de campana para regresar a estos años mágicos. Más tarde, la carpa tomó protagonismo para finalizar una gran noche sesentera. Con esta fiesta concluyen los actos del Carnaval hasta el próximo sábado, día en el que se celebrará el Gran Desfile de Comparsas tras haber sido aplazado por la lluvia. No obstante, para los que aún tengan más ganas de Carnaval, queda toda una noche de sábado por delante.
