El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha confirmado que 566 viticultores castellano-manchegos han cobrado cerca de 4,5 millones de euros de las ayudas del primer pago del nuevo Programa de Reconversión y Reestructuración de Viñedo. “Los agricultores que habían hecho la reestructuración de viñedo en los últimos meses ya han cobrado la ayuda”, ha manifestado.
Del mismo modo, desde Asaja Socuéllamos se confirma que todos los agricultores de la localidad que estaban en propuesta de pago han cobrado.
En total se ha modernizado una superficie de 1.479 hectáreas de viñedo en Castilla-La Mancha y se han beneficiado 138 viticultores de Albacete, 125 de Ciudad Real, 180 de Cuenca y 123 de Toledo con este primer pago. El consejero ha recordado que la campaña pasada del Programa de Apoyo del Vino terminó a mediados de octubre y a partir de esa fecha es, “cuando hemos tenido que recuperar el tiempo, los meses perdidos, para que los agricultores pudieran cobrar lo antes posible, una vez hechas sus inversiones”.
Desde ahora y hasta el mes de junio a Castilla-La Mancha le corresponden 34,5 millones de euros procedentes del Fondo Europeo de Garantía Agrícola (FEAGA) hasta junio de 2016; pero Castilla-La Mancha es capaz de absorber más fondos, de tal manera que si en el mes de junio algunas comunidades autónomas no han requerido de los fondos de reestructuración, la Consejería podría solicitarlos.
En este sentido, Martínez Arroyo ha afirmado, “vamos a hacer un esfuerzo, lo más grande posible, para tener todos los proyectos pagados y todos los fondos agotados a finales de junio para poder recibir más fondos de las Administraciones de otras comunidades autónomas que no sean capaces de gastarlos”. Es así como ha funcionado siempre y, “Castilla-La Mancha además ha sido, tradicionalmente, la comunidad autónoma que se ha beneficiado de estos fondos no gastados por otras y tenemos que aspirar a que esto siga siendo así”, ha añadido.
Cabe recordar que en 2014, Castilla-La Mancha no ejecutó todo el presupuesto asignado y no fue capaz de absorberlos, por lo que se perdieron fondos europeos no solo en la comunidad autónoma sino en toda España.
En la actualidad, la reconversión de viñedo del sistema tradicional de vaso al moderno en espaldera ha pasado de suponer el 3% al 35% en los últimos años y continúa la demanda de los agricultores que están pendientes de reestructurar su viña en Castilla-La Mancha.
